El Museo del Prado, nos invita hasta el 3 de Marzo a
visitar las maravillosas obras pintadas por Antonio Van Dyck (Amberes 1599 Londres 1647). Se conocen 160 cuadros de este periodo, de los que la
Exposición presenta 50 pinturas y 42 dibujos.
Comienza con un bellísimo autorretrato que inicia
cara al espejo, datado en 1615. Tendría 15-16 años. Al contemplarlo, cuesta
creer que a esa edad pudiera pintar con esa luz la expresividad de su mirada. A los 22 años llega a Italia, se instala en Génova
estudiando y analizando los trabajos de los grandes artistas de los siglos XV y XVI. A su llegada ya había realizado 300 pinturas. Se relacionó con
Tiziano, Tintoretto, Bassano y conoció a la mejor aristocracia de la ciudad. Retrató entre ellos a la
familia Spinola.
Cultivó diversos estilos a lo largo de su periplo por
las distintas ciudades italianas en las que trabajó.
En la Exposición, podemos disfrutar de “Sansón y
Dalila” uno de los más bellos.
Composición desarrollada con gran virtuosismo técnico, gran belleza cromática. Los
colores de la vestimenta de Dalila son de una extraordinaria belleza, La
expresividad de seducción, la mirada
de la anciana ¡sorprendentes!
Rubens fue su mentor, pero lo preparó de tal modo que
llegó un momento en el que el alumno superó al maestro. Esto lo podemos
comprobar paseando por la Sala de Rubens. Si pensamos a la edad en la que fueron realizadas las obras
que hemos contemplado en algunos detalles, superan al maestro.
Amigas/Amigos de la Asociación animaros a tomar el
AVE y visitarla.
(Magdalena Navarro)
No hay comentarios:
Publicar un comentario